El color gris en el mueble de cocina es tendencia. Pero no cualquier gris, sino dos tonos específicos: el gris antracita y el gris lino. La razón: toda una serie de ventajas tanto estéticas como funcionales que hacen de estos dos grises opciones muy versátiles.
Gris antracita en muebles de cocina:
Se trata de un gris muy oscuro, profundo, casi negro. Un gris que en muebles de cocina es sinónimo de elegancia y sofisticación, y que remite a una cautivadora serenidad.
Gris lino en muebles de cocina:
Hablamos de un gris cálido, que remite al de la tela de lino antes de teñirse. Natural, suave, armónico y muy sutil, casi neutro.
Pero, ¿qué paleta cromática podemos utilizar para acompañar al gris antracita y al gris lino en el diseño de cocinas? Afortunadamente, existe toda una variedad de combinaciones especialmente indicadas para cocinas con muebles grises en estas dos tonalidades.
Compañeros inseparables de los dos grises de moda
Cocina potentes visualmente, donde prima el gris antracita, o cocinas que buscan pasar desapercibidas, con el gris lino por doquier. Sean como sean tus muebles de cocina, estos son algunos de los compañeros cromáticos a los que puedes recurrir para encontrar el equilibrio en la combinación perfecta.
1. La eterna apuesta por el blanco:
Luminoso, amplificador de espacios, moderno… El blanco casa con todo, y con el gris antracita, aún más, creando una atmósfera diáfana y limpia, ideal para espacios pequeños o con escasa luz natural.
Podemos apostar por revestimientos en blanco y por una encimera de piedra natural, como el granito, donde el blanco sirva como lienzo a un ligero veteado en gris que se extiende también por el frontal de la cocina. En este caso, podríamos dedicar el gris antracita a los muebles superiores y a la isla o península de nuestra cocina abierta al salón, aunque son muchas las combinaciones posibles entre el blanco (mejor en acabado brillo) y el gris antracita.
2. La sofisticación del negro:
Elegante y contemporáneo, el negro sirve para dar un toque moderno y de sofisticación, e incluso industrial, a una cocina donde impera el gris lino, siempre que el espacio cuente con buena iluminación natural y que dejemos la nota de color a los accesorios. En estas cocinas, la madera o el ladrillo siempre serán bien recibidos en las paredes.
3. La calidad de la madera natural:
Cocinas acogedoras que, gracias a la madera, equilibran la neutralidad del gris, sea antracita o lino. Esta combinación funciona muy bien cuando se combina una encimera de madera clara o de tonos miel y mobiliario con puertas y cajones en gris claro o gris oscuro en acabado mate. También dedicando el gris al mobiliario bajo y la madera, al mobiliario superior y/o el frente de cocina.
Gris antracita y verde, para cocinas sofisticadas; gris lino y mostaza, naranja o azul verdoso, para ambientes vibrantes y llenos de vida; gris lino y terracota, en espacios suaves y acogedores… Existen otras opciones, más osadas, para combinar los muebles grises de la cocina de forma acertada. Lo importante es escoger la paleta de color en función del estilo deseado y factores como el tamaño de la cocina, la cantidad de luz natural, etc., para encontrar el equilibrio perfecto.
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Y es que, como hemos visto, los muebles grises en la cocina funcionan a la perfección con otros materiales como el acero inoxidable, la piedra o la madera, permitiendo combinaciones capaces de añadir un toque muy personal al espacio y una imagen fresca y funcional a largo plazo.
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